El día de hoy vamos a estar entrevistando a Romina Mantiñan, es animadora de fiestas, la cual tiene un salón de fiestas de todo tipo llamado “Caramelo”.
E: Entrevistadora
R: Romina
E: ¿Cómo empezó la idea de formar un salón llamado “Caramelo fiestas”?
R: La idea de “Caramelo fiestas” fue una idea medio “reformada”. Nosotros compramos el fondo de comercio de este salón, el cual anteriormente se llamaba “Caramelito”, con una trayectoria de 10 años. Solo estaba habilitado para fiestas infantiles. Como nosotros teníamos experiencia en el rubro, decidimos cambiar el nombre para que no sea tan infantil y también realizar eventos para adultos.
Reformamos el lugar para que en un sector quede la parte infantil y en el otro poder hacer otro tipo de celebraciones como casamientos, fiestas de quince, etc.
E: ¿Quiénes comenzaron trabajando principalmente?
R: Los que empezaron trabajando en animaciones, al igual que en las reformas y las ideas, fuimos los actuales dueños. Romina y Christian, al igual que mi hermano Pablo. Luego se empezó a sumar gente amiga, una sobrina, la mamá de una conocida. Hoy en día trabaja también nuestra hija, Tina. Siempre tratamos de que sea un ambiente familiar.
Creemos que el trabajo que brindamos termina siendo una carga emocional. Por eso tratamos de que el clima sea respetuoso y familiar. No solo siendo compañeros, si no también mezclando lo emotivo y lo sentimental, lo que logra el compromiso a la hora de trabajar.
E: ¿Qué expectativas tenías de “Caramelo Fiestas” al comienzo? ¿Crees qué ya se cumplieron?
R: Las expectativas siempre fueron las mismas desde la primera animación que hice. Hice que la gente pase un momento inolvidable, y que sepan que siempre pueden volver a elegirnos.
La idea es que ese día quede en el recuerdo de las personas, como algo divertido y como algo emotivo.
E: ¿Les gustaría, a futuro, poder abrir otro salón?
R: Abrir otro “Caramelo” sería medio imposible, tuvimos muchas propuestas concretas. Pero nosotros creemos que lo nuestro es tan artesanal, tan nuestro, que no podríamos tener a otras personas en otros lugares haciendo lo mismo.
Cada uno tiene un rol muy importante, como mi marido, que es el que se encarga de cocinar y hacer los caterings. No me imagino a otra persona haciéndolo y menos brindarle la confianza que yo le tengo a él.
E: ¿Cómo les afectó la pandemia? ¿Qué hicieron para seguir adelante con el salón en ese tiempo?
R: La pandemia nos afectó mucho, ya que fue el último en abrirse porque era el rubro menos indispensable.
Nosotros lo que hicimos fue seguir con los catering, a otros salones de fiestas, para que vendan a personas cuando hacían cumpleaños o juntadas en sus casas, eso fue algo que nunca falló.
Nunca dejamos de trabajar, pudimos agregar tablas de picadas y desayunos que fue un furor y explotó. Hubo muchos pedidos y pudimos mantener los sueldos de la gente que trabajaba en el salón, tanto como el alquiler y los servicios.
El lado positivo fue que cuando volvimos, llegamos sin deudas y pudimos seguir con la mejor de las ondas.
Las fiestas abonadas o señadas anteriormente las mantuvimos sin cobrar nada extra.
E: ¿Incluyen servicio de disfraz?
R: A modo de disfraz, tenemos todos los cuales alquilamos. A modo personal, contamos con una mascota la cual se llama “Perro caramelo”, que participa en la repartición de desayuno, sin ningún cargo. En el caso de ser el cumpleaños de algún menor, también participa en algunos eventos si así lo desea.
E: ¿Cuáles son los colegios que predominan en contrataciones con el salón?
R: Vienen todos los colegios de Sarandí, Wilde, Domínico y Avellaneda centro. Dos de los que más predomina en eventos son el San Patricio y Pío XII.
De los colegios que vienen muy pocos, son de Wilde. Yo supongo que es porque les queda medio a trasmano, pero el Kennedy uno de los que más viene de esa zona.
E: ¿Qué expectativas tenían sobre el salón? ¿Sentís que se cumplieron?
R: Las expectativas siempre fueron las mismas desde la primera animación que hice, que fue que la gente pase un momento inolvidable, que no se olviden de ese día y siempre puedan volver a elegirnos.
La idea es que ese día quede en el recuerdo de las personas, como algo divertido y como algo emotivo.
Las expectativas se cumplieron y más de lo que esperábamos.
Hace 12 años que estamos instalados y cumplimos un montón de sueños y objetivos que no pensábamos que iban a pasar.
Fotos del salón de fiestas Caramelo
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