La Casa del Niño y la Niña, “El Campito”, es una institución privada y, sin fines de lucro, dependiente de la Asociación Civil Santa Juana Antifaz. Es una organización laica y fue creada por las "Hermanas de la Caridad" de dicha institución.
Se sostiene económicamente a través de donaciones, voluntariado social, becas UDI (Unidades de Desarrollo Infantil) ubicada en el partido de Avellaneda (Deheza 1375) que desarrolla su labor con niñas y niños de 6 a 14 años de lunes a viernes de 8:30 a 12 hs. y de 13:30 a 17 hs en la cual participan de talleres, apoyo escolar, comedor y diversas actividades. Su misión es crecer acompañados. Tiene como objetivo principal, lograr la promoción integral de los niños que concurren a la institución, a través de la creación de un espacio donde estos puedan desarrollarse física, psíquica, social y espiritualmente.
La visita y el compromiso con esta institución es también una forma de misionar, es una acción solidaria, es estar atento a la necesidad del prójimo. Misionar y ayudar en el día a día con pequeñas acciones, puede cambiar la realidad de las personas. Desde revisar nuestro guardarropa y seleccionar aquello que ya no usamos, o en realidad no era tan necesario tener, hasta comprar una rifa a los chicos de la escuela, son actos que pueden significar la sonrisa de un niño al recibir un juguete, el agradecimiento de un adulto por la llegada de una ropa de abrigo. Misionar es un acto de solidaridad que se basa en el respeto y la empatía que nos conduce a comprender que el otro necesita de nuestra colaboración.
Nuestra institución, en especial el grupo misionero, se encuentra muy involucrado en la ayuda al campito. Todos los años, para el día del niño juntamos juguetes en buen estado y en esa jornada los llevamos y realizamos distintas actividades lúdicas, para que todos los chicos pasen una cálida y agradable jornada. La alegría de los niños que valoran el pequeño gesto nos hace sentir algo diferente, una sensación de satisfacción difícil de describir si no se ha vivido. Si somos capaces de mirar e identificar lo que pasa alrededor, seremos personas más abiertas y dispuestas a cambiar el mundo en el que vivimos. En contexto de ASPO (aislamiento social preventivo obligatorio), lamentablemente esta jornada no se pudo realizar. Sin embargo, como grupo misionero, no quisimos dejar pasar la fecha, y juntamos golosinas para que los niños recibieran un presente de parte de nuestra escuela.
El 8 de abril, los delegados de 6to año junto con la directora Silvina Esposito, en representación de todos los alumnos de la institución, asistieron a "El campito” llevando los huevos de pascua. Con el fin de que todos los niños que asisten reciban un regalo para disfrutar en esta Semana Santa.
Para recaudar el dinero necesario para poder realizar todas las acciones anteriormente mencionadas, los delegados organizaron la venta de rifas. Afortunadamente, gracias a la colaboración y solidaridad de todos los alumnos, profesores y directivos, se vendieron todos los números de las rifas antes de lo previsto.
Un aporte muy valioso en este acto solidario, fue que los estudiantes del nivel primario del Centro Educativo Loreto elaboraron mensajes alusivos a las pascuas. Estos fueron obsequiados junto con los huevos de pascua a los niños del campito. La iniciativa fue muy exitosa, ya que los estudiantes en su totalidad participaron con entusiasmo.
Según los testimonios de los alumnos que tuvieron la oportunidad de asistir y conversar con las hermanas, ellas les transmitieron que estaban muy contentas y agradecidas por el gran aporte que realizamos. Al haber un incremento en la cantidad de niños que asisten a “El Campito”, sin nuestra ayuda hubiese sido muy difícil obsequiar un huevo de pascua a cada chico. Además, los delegados se mostraron muy contentos y entusiasmados por brindar esta colaboración. Por lo que ya están planificando las actividades a realizar con los chicos en la próxima visita por el día del niño.
A nuestro juicio, no es necesario ayudar en fechas determinadas o unirse a un grupo para realizarlo, sino que, en cualquier momento. Ya sea cuando a uno lo sienta pertinente, o vea que el otro necesita algo que se puede darle, desde lo material hasta un abrazo o simplemente, hacerle compañía.
Ayudar nos complementa como personas.
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