La tendencia del veganismo

La alimentación es un factor importante en nuestras vidas y en la de cualquier ser vivo, ya que de esta obtenemos los nutrientes que necesitamos, no sólo para nuestra rutina diaria, sino que también aportan la energía que almacenaremos y gastaremos en futuras tareas. La buena nutrición ayuda a nuestra digestión, gran parte del funcionamiento del organismo y a nuestros procesos fisiológicos. Todo esto, obviamente, es desde un punto de vista biológico, pero ¿qué pasa realmente con la comida en la sociedad que la consume? ¿Acaso la cultura es la que determina la alimentación de cada uno? ¿Somos lo que comemos o comemos lo que pensamos?

En este artículo básicamente vamos a profundizar sobre el veganismo como un estilo de vida, que es “relativamente” reciente, pero en estos últimos años fue tomando más seguidores y abrió nuevas puertas para debatir. Los motivos que llevan al mismo se fundamentan en argumentos éticos, medioambientales y de salud. En relación con los últimos, no existe evidencia de que una dieta vegana sea más saludable que otras dietas, siempre que estén bien estructuradas. Como todo tipo de dieta o alimentación, ya sea por consumo ideológico o no, tiene sus beneficios y consecuencias.

1.      Debemos definir y diferenciarlo del vegetarianismo: Esto es un poco obvio en las generaciones más jóvenes, las cuales forman la mayor parte de este estilo, pero mucha gente se los confunde y piensan que son lo mismo. La persona vegetariana es aquella que no consume ningún tipo de carne animal y está en contra de los malos tratos que reciben antes de ser sacrificados o simplemente son más sensibles a que los maten. Hasta acá parece que son lo mismo, pero el veganismo no se queda en esta postura, sino que es un pensamiento aún más complejo. Un vegetariano solo rechaza la carne, pero sigue consumiendo productos que derivan de animales, como la leche, la miel o los huevos. Pero el vegano es aquel que rechaza todo lo que provenga de un animal: su comida, medicamentos, tipos de vestimentas, cosméticos y experimentaciones en animales. Dejando de lado la estructura de la dieta de cada uno, ambos son naturistas y pelean por los derechos de los animales.

2.      Tipos de Veganismo: Resulta importante saber por qué algunas personas quieren seguir este tipo de alimentación, por lo que se pueden encontrar las siguientes motivaciones:

     Veganismo Dietético: Es aquel donde la persona establece una dieta que tiene como propósito el bienestar de su salud, ya que entiende las dietas animales como nocivas o tóxicas para el cuidado de su cuerpo. Las dietas veganas, bien planificadas, tienden a ser más ricas en fibra dietética, magnesio, ácido fólico, vitamina C, vitamina E, potasio y fitoquímicos; y más bajas en calorías, grasas saturadas y colesterol. Aunque, como resultado de la eliminación de todos los productos de origen animal, las dietas veganas pueden provocar importantes carencias nutricionales, principalmente de vitamina B12, vitamina D, calcio, ácidos grasos omega-3, hierro y zinc.

     Veganismo Ético: Surge del rechazo a las condiciones indignas en las que muchos animales de cría son tratados en granjas y mataderos. Se manifiesta abandonando el consumo de cualquier producto vinculado con dichas industrias: las carnes blancas y rojas, los productos lácteos, los productos de cuero, etc. Otro argumento ético es que la explotación y sacrificio de animales causan daños que exceden su beneficio. En los adolescentes, la adopción del veganismo por razones éticas puede provocar un bajo interés por los aspectos nutricionales.

     Veganismo Ambientalista: Su principal motivación es el ecologismo y la preservación de la biodiversidad del planeta. Se abandona todo tipo de productos de origen animal, ya sean o no comestibles. La captura o cría industrial de animales es perjudicial para el medio ambiente y, además, insostenible. Las dietas basadas en plantas son más sostenibles que las dietas ricas en productos animales, puesto que utilizan menos recursos naturales y provocan menor impacto en el medio ambiente. A nivel global, la ganadería es una de las principales causas de emisión de gases de efecto invernadero y, probablemente, la principal fuente de contaminación del agua en los países desarrollados y en vías de desarrollo.

3.  Ventajas:

·         Previenen enfermedades cardíacas.

·         Disminuye la presión arterial.

·         La sal marina no refinada es mucho menos dañina que la refinada que genera infartos, hipertensión y otras patologías.

·         Facilita la expulsión de residuos alimenticios.

·         Los cereales, vegetales y frutas permiten un mayor control de la diabetes.

·         Es saludable para quienes tienen colesterol alto. Ellos deben ingerir soja, berenjenas, quingombó, almendras, margarina con esteroles vegetales y cebada.

·         Tanto las pastas como los cereales son buenas fuentes energéticas.

·         Las vitaminas y nutrientes que el organismo necesita están contenidas en los cereales, las frutas y los vegetales.

·         Suele ser más económica.

4.      Desventajas: Como la dieta vegana se enfoca en la sustitución de carnes y lácteos por otros, se enfrenta con la dificultad de obtener ciertos nutrientes grasos esenciales. Por ende, los veganos deben o bien ingerir suplementos vitamínicos, o bien alimentarse con una dieta bastante rigurosa. Uno de los nutrientes escasos es la vitamina B12, que se obtiene exclusivamente a través del consumo de animales. Por otro lado, a menudo los veganos acuden a alimentos procesados para evadir los cárnicos, como la carne de soja o los vegetales envasados. Estos suelen ser poco saludables o bien producir obesidad, aumento de peso o anemia en el organismo.

5.      Perspectiva social: En sí, el gran problema que enfrentan es que la mayoría de las personas los ven como un movimiento con vínculos pseudoreligiosos o pseudocientíficos. Estos prometen la cura de las enfermedades más crueles con tan sólo una dieta vegana, o que son irresponsables con sus declaraciones, disuadiendo a personas enfermas de recurrir a tratamientos adecuados. Se considera una dieta vegana como una dieta baja en calorías que puede conducir a la anemia y a la desnutrición. Esta crítica no es acertada en todos los casos. Los peligros de desnutrición dependen del modo específico en que se lleve a cabo dicha dieta, y no del hecho de no comer alimentos de origen animal en sí mismo.  

Ricardo Quiroz: Como casi todas las corrientes o movimientos ideológicos recientes, el veganismo propone y parece ser una buena alternativa para variar en una alimentación más sana y que promete una mejor forma de vida; pero en las últimas noticias solo se ven personas que buscan llamar la atención y sienten superioridad, porque piensan que dejando de comer carne y consumir otros productos que provienen de animales van a terminar con los mataderos, que los animales van a vivir libremente en un lugar mejor sin sufrir y sin tener en cuenta que la cadena alimenticia es algo natural y que si nosotros no nos comemos aquella vaca, pollo o cerdo, capaz otro animal si lo puede hacer. Prácticamente el problema principal no está en su defensa por los animales, sino que su error más grande es el de adoptar el veganismo como una moda para querer mostrar que son “personas más civilizadas” sin tener en cuenta una dieta estructurada y los peligros de abandonar aquellos elementos nutritivos que ingerimos de las carnes y sus derivados. Otra cuestión es que cada vez que se debate algún tema de este tipo solo caen en la burla y en un conjunto de acciones y palabras que, en vez de demostrar una alternativa sólida y bien argumentada, ya sea desde un punto de vista naturalista, ambiental o solo dietético, lo único que hacen es transmitir vergüenza ajena y hacer el ridículo frente a la gran mayoría de las personas que los vemos en las noticias. Aunque también encontramos a aquellos verdaderos veganos que se toman esto como un pensamiento vital en su estilo de vida. 

Bruno Segundo: En consecuencia de lo escrito podemos decir que una dieta vegana puede llegar a ser saludable, pero debemos preguntarnos hasta qué punto. Recordemos que todas las verduras son rociadas con agroquímicos sumamente tóxicos y cancerígenos, por lo que si se busca una vida realmente saludable, tal vez no sería una buena idea apuntar a este estilo de vida. Concuerdo con Ricardo Quiroz en el sentido de que ciertos jóvenes utilizan el veganismo como moda y lo único que logran es poner en ridículo esta alternativa que busca la protección de los animales. Debemos aclarar que este movimiento reciente aglutina a miles de jóvenes entusiastas que promueven la defensa de los animales, aunque algunos de ellos más radicalizados destruyen locales y promueven manifestaciones violentas, generando repudio por parte de la opinión pública. En mi opinión, cada uno es libre de comer lo que desee pero no concuerdo en lo más mínimo que me intenten imponer su estilo de 

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