Los viernes por la tarde en la parroquia resultan ser días de mucha actividad. Funciona Cáritas y se conglomera una gran cantidad de gente. Al mismo tiempo se encuentra el merendero ya mencionado en artículos anteriores, y ahora se presentan dos propuestas nuevas: una peluquería para los más chicos y la realización de electrocardiogramas médicos.
Ambas actividades son completamente gratuitas y están destinadas a toda la comunidad. En el primero de los casos, se acercó un peluquero del barrio, de la calle Magdalena, y se ofreció a utilizar el espacio del merendero para cortarles el pelo a los niños. Ellos se emocionaron mucho con el tema, relataban con alegría a sus madres que al fin tenían el corte nuevo que querían. Por otro lado, vino un padre de catequesis que trabaja en el ámbito de la salud y les contó a los sacerdotes la necesidad de, con su vocación, ayudar a la gente. Buscando un día que se adaptara a sus horarios, coincidió también con los viernes. El único requisito para realizarse el ECG es contar con una orden médica. Parece que la idea tuvo bastante aceptación: se forman largas filas de gente que esperan por hacerse su estudio que quizá fuera de ahí les sería muy difícil realizarse ya que, al ser aparatos de alta complejidad, tiene un alto costo en cualquier otro lugar. El primer día que se hizo se acercaron casi 15 personas y, aunque el número fue bajando, aún siguen yendo en bastante cantidad.
Para finalizar, nos contaba el padre Mauro que se presentó una tercera persona con un proyecto educativo de capacitación para jóvenes mayores de 18 años con la idea de abrirles oportunidades laborales. Se dictan talleres de electricidad domiciliaria, informática, gestión administrativa y arreglo de celulares, los cuales constan de 3 horas semanales. Los cupos son limitados, variando el número según la actividad. Esto se seguirá realizando a lo largo del año ya que al ser una sola persona que dicta todas las áreas, finaliza un taller y luego comienza el otro. Hasta el día de hoy, se han acercado a participar varios muchachos al de administración, que fue el único llevado a cabo por ahora.
Es muy emocionante ver cuántas personas se ponen al servicio del otro, de la comunidad, cuando tranquilamente se podrían quedar conformes en su trabajo o su hogar. Nos pareció importante contarlo porque realmente es admirable la iniciativa de toda la gente que se acerca a dar una mano sin condiciones, sabiendo que no gana nada a cambio pero que ayuda un montón a otra persona, haciendo tal vez algo pequeño pero que puede significar un sacrificio para uno.
Esto último nos recordaba al discurso del Papa Francisco en la Jornada Mundial de la Juventud llevada a cabo en Río de Janeiro, en el año 2013, donde nos llama a todos nosotros que somos Iglesia a abandonar la comodidad y salir al encuentro y al servicio del otro, diciendo textualmente: “¿Qué es lo que espero como consecuencia de la Jornada de la Juventud? ¡Espero lío! ¿Que acá dentro va a haber lío? ¡Va a haber! ¿Que acá en Río va a haber lío? ¡Va a haber! ¡Pero quiero lío en las diócesis! ¡Quiero que se salga afuera! ¡Quiero que la Iglesia salga a la calle! ¡Quiero que nos defendamos de todo lo que sea mundanidad, de lo que sea instalación, de lo que sea comodidad, de lo que sea clericalismo, de lo que sea estar encerrados en nosotros mismos! Las parroquias, los colegios, las instituciones, ¡son para salir! Si no salen, se convierten en una ONG, y la Iglesia no puede ser una ONG.”.
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