El grupo de parroquia del diario entrevistó a Johanna Vallejo de 21 años, coordinadora del 2 del batallón 67 de exploradores de Nuestra Señora de Loreto.
¿Desde cuándo funciona el Batallón 67 en Loreto?
Comenzó en 1976, pero la apertura oficial fue el 24 de diciembre de 1978 y recibió el número 67.
¿Cuál fue la idea que inspiró a San Juan Bosco para fundar Exploradores?
Don Bosco no fundó los Exploradores, es un error muy común. Él inició el primer oratorio en Valdocco.
Exploradores fue fundado por Lorenzo Massa y José Vespigniani hace más de 100 años. Ambos eran salesianos y seguían la obra de Don Bosco en Argentina.
En ese momento existían los scouts y se dieron cuenta de la carencia que había en el grupo que ellos admiraban. En ese entonces eran diferentes los scouts a lo que son hoy en día. Actualmente, la mayoría está orientado a una fe, en ese entonces no eran más que grupos deportivos. Percibían esa carencia de la fe, de la catequesis, del carisma que tiene exploradores.
Entonces decidieron fundar un batallón, es el está en Almagro, y ahora tiene más de cien años.
¿Cómo es la organización del batallón?
En principio, el batallón está dividido en lo que es “Ambientación”, compuesto por los chicos que recién ingresan. Nosotros decimos que no son exploradores, por el simple hecho de que aún no han tomado la promesa.
Después está “Experiencia Exploradora”, allí están los más chicos, quienes son pioneros y fuegos.
Luego se encuentran “Rastreadores y Hogueras”. Después las “Antorchas”.
Por último, toda la comunidad de Soles. Esta se divide entre animadores y el Consejo, donde están todos los coordinadores. Luego están los jefes del batallón junto con, si es que hay, un capellán: un cura que está en la iglesia acompañando a los exploradores y a todo lo que es la comunidad. Por otra parte tenemos lo que es sil, son todas aquellas personas que prestan el servicio. Se encargan de dar la merienda, siempre dan una mano con la organización y todo tipo de cosas que obviamente son necesarias para poder desempeñar el resto de las actividades.
¿Cuántos integrantes hay en la actualidad?
Actualmente son aproximadamente ciento cincuenta chicos. Debido al sector de “Ambientación” entraron entre sesenta y ochenta integrantes más. Así que son más o menos ese número.
¿Qué proyecto tienen para este año?
Nosotros cada año tenemos un aguinaldo, es una suerte de mensaje que nos manda el rector mayor, quien es el representante de los salesianos y el sucesor de Don Bosco. Este año habla sobre la escucha, la comprensión y el acompañamiento al joven. Como salesianos, siempre necesitamos impulsar nuestro año hacia ese aguinaldo, pero también tenemos objetivos propios del batallón y creo que, como cada año, siempre podés mejorar, podés seguir creciendo y podés inculcar el lema que tenemos con los chicos: "Estar siempre listo para servir".
Para nosotros como batallón, este año no hay cambios porque se abrió campaña, quedaron muchos chicos nuevos y siempre es genial eso.
También hay nuevas personas en la comunidad, que se encargan de animar y están en sil haciendo su servicio.
Así que es un año de cambios, siempre intentamos crecer e inculcar todos nuestros valores a los chicos.
¿Qué es el batallón para vos?
Para mí el batallón es un segundo hogar. Es como... vos te formas ahí cada día. Por más que yo estoy a cargo de los chicos y doy toda la información, siempre sigo aprendiendo. Estoy en constante aprendizaje y eso es un vale porque vos los acompañas ahí, aprendes cosas nuevas, te llevas amigos, y personas que nunca vas a poder dejar. Te encontras en constante contacto con Dios y con el prójimo.
Se volvió mi segunda familia, aunque al principio no crees que vas a llegar a tener tanta confianza. Después de tantos años, muchas veces se hace difícil dejarlo ya que tenes tantas cosas, tantas obligaciones, pero creo que para todas las personas que estamos ahí después de un tiempo, se forma un segundo hogar.
¿Qué soñás para el futuro?
Espero que el batallón siga perfeccionándose y siga creciendo. Es un lugar lleno de alegría, lleno de confianza, lleno de gente que trabaja un montón por esto, por esto que quiere, que ama, y cada día podemos dar un poco más.
Hay muchas cosas para mejorar, pero hay mucha gente que no tiene la fuerza para hacerlo. El hecho de que esté lleno de jóvenes crea un ambiente hermoso. Ellos nunca dejan de trabajar.
Personalmente, sé que en algún momento me alejaré de lo que es hacer servicio dentro del batallón, pero quiero poder seguir dando una mano desde afuera y devolviendo todo aquello que recibí en un momento.
Muchas Gracias.
¡Gracias a vos!
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